Por José Ruiz Mercado
¿Cuántos poetas de la escena conoce usted? La tradición nos ha marcado en dos grandes líneas. La del teatro estaunidense y la del absurdo. La lista en ambos es grande. Tanto como la tradición de los maestros con quienes nos formamos.
Consuelo Pruneda, Daniel Salazar, José Luis Moreno, tan sólo por mencionar alguno de la primera vertiente con un autor de cabecera: Stanislavski. Con él llega Seki Sano, y la tradición con Chejov. Todo un periodo en la escena.
Stanislavski no llegó a México, pero sí su alumno Seki Sano, quien radicó en varias ciudades del país hasta quedarse en la Ciudad de México. Su influencia fue grande. Ernesto Pruneda fue uno de sus alumnos directos.
Aquí la geografía cultural se diversifica. Stanislavski es conocido en América. Incluso la tradición del teatro cubano, argentino, fueron testigos de las enseñanzas del autor de Un Actor se Prepara. El realismo dio la pauta al naturalismo.
Como anécdota, Sabina Berman escribió un monólogo en donde un actor se cuestiona ante la teoría y como ponerla en práctica cuando se enfrenta a un trabajo en concreto. La interrogante de todo estudiante cuando se enfrenta a lo cotidiano de su trabajo ¿De qué me sirvió la teoría? ¿Cómo ponerla en práctica? La obra: Un actor se Repara.
Así, entre los estaunidenses y los rusos, Nueva York se convierte en cuna, capital del espectáculo. Luego, la segunda parte con los absurdos ofrecen la novedad. Siempre Nueva York con sus emigrantes. Francia con sus propuestas. Todo un acontecimiento.
La situación de la escena en México en los inicios del Siglo XX, como en todas las artes, tuvieron cambios drásticos, desde las propuestas del modernismo (ya desde los finales del XIX), pero de nuevo el oscuro fantasma del positivismo se hizo presente para de alguna manera impedirnos ver la contraparte.
El efecto mediático hizo su función. Recordemos el movimiento de los Pirandellos, su participación en los medios, posteriormente en las altas esferas de la administración pública.
¿Qué sucedió con los estridentistas? Quienes, si bien, también estuvieron en la nómina alguna vez, no estuvieron en el lado más efectivo ¿Cuántos autores con una obra consolidada continúan, a pesar de ser “cita obligada” para especialistas, sin presencia en los escenarios sólo por adolecer de lo mediático?
Aquí radica la falla en la calidad del lector; no en la ausencia de lecturas, sino en la falta de búsqueda, en la ausencia de un método ¿Cuándo montamos una obra analizamos la obra total del autor?
Federico García Lorca es conocido por La Casa de Bernarda Alba? Como uno es muy ocioso se pregunta ¿Cuántos “Bernardos” han sido llevados a escena en “versión libre”? Ah, la ociosidad.
Nuevamente aparece la ausencia de un método idóneo. Lo temático. Requerimos de un método total en donde ese todo esté implícito. Esto nos ha impedido conocer a fondo las aportaciones de muchos autores; nos hemos perdido el surrealismo de Lorca, la poeticidad de Shakespeare.
¿Cuántos poetas de la escena conoce usted? He escuchado la barbarie de muchos directores argumentar el como, para llevar a la escena una obra escrita en verso darle una estructura de prosa.
¿Cuántos poetas de la escena conoce usted?
¿Cuántos poetas de la escena conoce usted? La tradición nos ha marcado en dos grandes líneas. La del teatro estaunidense y la del absurdo. La lista en ambos es grande. Tanto como la tradición de los maestros con quienes nos formamos.
Consuelo Pruneda, Daniel Salazar, José Luis Moreno, tan sólo por mencionar alguno de la primera vertiente con un autor de cabecera: Stanislavski. Con él llega Seki Sano, y la tradición con Chejov. Todo un periodo en la escena.
Stanislavski no llegó a México, pero sí su alumno Seki Sano, quien radicó en varias ciudades del país hasta quedarse en la Ciudad de México. Su influencia fue grande. Ernesto Pruneda fue uno de sus alumnos directos.
Aquí la geografía cultural se diversifica. Stanislavski es conocido en América. Incluso la tradición del teatro cubano, argentino, fueron testigos de las enseñanzas del autor de Un Actor se Prepara. El realismo dio la pauta al naturalismo.
Como anécdota, Sabina Berman escribió un monólogo en donde un actor se cuestiona ante la teoría y como ponerla en práctica cuando se enfrenta a un trabajo en concreto. La interrogante de todo estudiante cuando se enfrenta a lo cotidiano de su trabajo ¿De qué me sirvió la teoría? ¿Cómo ponerla en práctica? La obra: Un actor se Repara.
Así, entre los estaunidenses y los rusos, Nueva York se convierte en cuna, capital del espectáculo. Luego, la segunda parte con los absurdos ofrecen la novedad. Siempre Nueva York con sus emigrantes. Francia con sus propuestas. Todo un acontecimiento.
La situación de la escena en México en los inicios del Siglo XX, como en todas las artes, tuvieron cambios drásticos, desde las propuestas del modernismo (ya desde los finales del XIX), pero de nuevo el oscuro fantasma del positivismo se hizo presente para de alguna manera impedirnos ver la contraparte.
El efecto mediático hizo su función. Recordemos el movimiento de los Pirandellos, su participación en los medios, posteriormente en las altas esferas de la administración pública.
¿Qué sucedió con los estridentistas? Quienes, si bien, también estuvieron en la nómina alguna vez, no estuvieron en el lado más efectivo ¿Cuántos autores con una obra consolidada continúan, a pesar de ser “cita obligada” para especialistas, sin presencia en los escenarios sólo por adolecer de lo mediático?
Aquí radica la falla en la calidad del lector; no en la ausencia de lecturas, sino en la falta de búsqueda, en la ausencia de un método ¿Cuándo montamos una obra analizamos la obra total del autor?
Federico García Lorca es conocido por La Casa de Bernarda Alba? Como uno es muy ocioso se pregunta ¿Cuántos “Bernardos” han sido llevados a escena en “versión libre”? Ah, la ociosidad.
Nuevamente aparece la ausencia de un método idóneo. Lo temático. Requerimos de un método total en donde ese todo esté implícito. Esto nos ha impedido conocer a fondo las aportaciones de muchos autores; nos hemos perdido el surrealismo de Lorca, la poeticidad de Shakespeare.
¿Cuántos poetas de la escena conoce usted? He escuchado la barbarie de muchos directores argumentar el como, para llevar a la escena una obra escrita en verso darle una estructura de prosa.
¿Cuántos poetas de la escena conoce usted?
Dramaturgo, escritor, director, actor y docente.
Miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte. Autor de numerosos libros de poesía, teatro, narrativa y ensayo.
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